martes, 2 de septiembre de 2008

ALFREDO ALAMBARRI, PRECURSOR DE POLÍTICAS SOCIALES

Escribe Walter Ernesto Celina

En el pasado las políticas sociales estuvieron fuertemente enlazadas a los conceptos de la medicina moderna.
Si de las cuestiones de la infancia se trata, en Uruguay y América, el Dr. Luis Morquio puede ser considerado un pionero insigne.
Desde los años 40 del siglo pasado, otro médico pediatra, el mercedario Dr. Alfredo Alambarri, fue sentando los conceptos de una atención social al niño, partiendo de la idea básica del binomio madre-hijo, ensamblada a la de una familia funcional. Se trataba de un elemento conceptual original, dialéctico, nuevo. Verdaderamente revolucionario.

A la profilaxis de las enfermedades infantiles, con dispensarios, gotas de leche, casas-cuna, etc., se incorporaron servicios maternales para que el trabajo de la mujer no entorpeciera la crianza de los niños más pequeños.
Los avances de la pedagogía enriquecieron los primeros centros infantiles. Surgieron así los jardines de infantes y complejos de atención de niños, que se sumaron y cambiaron la concepción de los viejos “asilos”, que pasaron a transformarse en internados -evitando la masificación- y casas-hogares, de porte reducido.

En Mercedes (Departamento de Soriano), por ejemplo, al centro “Chopitea”, se agregaron las obras “Vizcaíno”, ahora articuladas bajo una doctrina activa de protección a la infancia.
Alambarri condujo allí experiencias inéditas, aceptadas, sin discusión, ¡cincuenta años después!
Un perfil distinto fue encauzándose y, así como Educación Primaria fue abriendo “jardines”, el sistema tripartito de las Cajas de Asignaciones Familiares fue dando coberturas a la mujer y al niño por ramas gremiales importantes. Se iniciaba una seguridad social más amplia. No era un mero asistencialismo. Nacían los derechos de las personas a disponer de servicios con coberturas sistematizadas.

En el fermento combinado de las necesidades de mejoramiento y humanización de las primitivas prestaciones, de una más eficiente atención a la familia del trabajador y en la puja de lo que eran capaz de ofrecer el “socialismo real” y las estructuras del capitalismo, hubo cabida para ensayos innovadores y combinaciones metodológicas. Se produjo un avance.

En este escenario, durante la administración del presidente Andrés Martínez Trueba, el Dr. Alfredo Alambarri pasa a dirigir el Consejo del Niño (INAME desde 1986 y, luego, INAU).
Alambarri fue un extraordinario estudioso y un intelectual brillante. Abrevaba en los principios de una ética humanista. Tenía muy claro cuáles eran las limitaciones de la política imperante y, más todavía, las estrecheces que el sistema imponía. No cejó, sin embargo, en impulsar reformas -que fueron muchas-, ni de llevar adelante experiencias novedosas.
Abrió jardines de infantes en barrios populosos, llevó la laicidad allí donde el Consejo del Niño pagaba por la atención de menores, fundó casas-hogares para jóvenes y niños, promovió la labor de hogares sustitutos a cargo de cuidadoras, perfeccionó y controló los mecanismos de la adopción, potenció la inserción de pupilos en la enseñanza primaria pública, media, técnica y universitaria, dio vida a la división educación -prevista en el Código del Niño- y cuando la asistencia social comenzó tomar rango profesional, confirió a estas trabajadoras relevancia y las ligó a las familias carenciadas.
Como vareliano convencido advirtió el rol que la escuela pública podía cumplir para la atención de los niños de los barrios donde la falta la vivienda, de trabajo, de salubridad, etc. incidía en la disgregación familiar, vulnerando los derechos infantiles.

Consecuencia de esta óptica fue que colaboradoras suyas promovieron, en 1985, las escuelas experimentales de tiempo completo, lo que después fuera asumido como política gubernamental. Otro tanto pasó con la posibilidad de extender los jardines de infantes desde los 3 años.
52 años después, sin que nadie lo haya dicho hasta ahora, pragmáticas de los equipos de Alambarri vuelven a ser tomadas en relación a la contención de los niños en estado de calle.
Cabe recordar que, cuando en 1956, la crisis productiva comenzó a impactar, la mendicidad infantil tuvo un registro en alza y el fenómeno del delito, protagonizado por púberes y jóvenes, se hizo patente.

El Dr. Alfredo Alambarri, con la opinión de la cátedra penal, con miembros de la Suprema Corte de Justicia y acompañado de las voces de la mejor doctrina nacional, se opuso a la rebaja de la imputabilidad de los menores de 18 años. Sostuvo que la represión y el confinamiento y, menos aún, la promiscuidad carcelaria, fueran respuestas a una cuestión social.
Entendía que la vida callejera del niño era una pésima escuela y exploró las causas de este abandono. Una de sus manifestaciones era la mendicidad, de la que hoy también se habla.
Creó en Montevideo la Brigada Móvil de Acción Social. Recorría las calles. Detectaba y recogía menores en vagancia o escudados en la venta de estampitas religiosas y pequeños enseres. Devolvía los niños a sus familias, indagaba la razones de la desatención, procuraba hogar a quienes no lo tenían, les concedía amparo y estudiaba caso a caso. Lo hacía con recursos infinitamente menores a los que años después se dispusieran. Incorporó voluntarios, absolutamente honorarios.
Después de él aquellas actividades perdieron eficacia.

La Brigada de referencia aconsejaba -tal cual hoy la hace el nuevo INAU- no dar monedas a los menores, como forma de no estimular su presencia en la vía pública y desalentar a quienes hacen un modus vivendi lanzando a sus hijos a mendigar. Y no se ignoraba que, en algunas situaciones, ese mendrugo, dado por un mayor con buena voluntad, tal vez sirviera para comprar algún alimento.
Para Alambarri esto no era lo principal. La mendicidad, la vida callejera, el acto violento de un joven o aún de un niño constituían -y son- epifenómenos, que esconden una patología social profunda: la que hay que atacar.
Este gran ciudadano, con sagacidad política, advertía cuáles eran los factores determinantes.
Abrazó los ideales de una sociedad fundada sobre principios de justicia, solidaridad y responsabilidad. Fue un propulsor auténtico de noveles políticas sociales. Tuvo claridad para saber las limitaciones de la reforma y la eficacia del cambio. No negó a aquella, ni a éste.
Supo ver los árboles y el bosque.
20.05.08

viernes, 13 de junio de 2008

LAS PERVERSIONES, POR SU NOMBRE

Escribe Walter Ernesto Celina

La sociedad uruguaya se va abriendo paulatinamente a la consideración de los temas de la sexualidad. Lo hace con un retraso de décadas, lo que debiere llevar a profesionales, educadores, comunicadores y agentes sociales a extremar sus esfuerzos para coadyuvar a una consideración franca y sin tabúes y, a la vez, respetuosa, de los múltiples factores que intervienen en un aspecto fundamental de la vida social y personal.
En un aporte sin pretensión técnica, al sólo efecto de divulgar términos y facilitar la caracterización de situaciones, se presentan algunos estados conocidos como perversiones.

VOYEURISMO. Tendencia consistente en buscar la satisfacción sexual con la visión de escenas eróticas reales, o ficticias, sea en impresos, videos, Internet, etc.

EXHIBICIONISMO. Impulso para mostrar en público zonas sexuales.

NECROFILIA. El término viene del griego. Significa atracción por los muertos. El placer necrófilo reside en la verificación del contacto o en la excitación por la contemplación de un muerto. Puede provocarlo la evocación de un cadáver.

GERONTOFILIA. Supone una especial seducción por adultos mayores, en las variantes heterosexual u homosexual.

PEDOFILIA O PEDERASTIA. Pedofilia es la predilección sexual que un adulto siente hacia niños o adolescentes. En una distinción más fina, el pederasta es un pedófilo que pasa a la acción incurriendo en un delito, según las circunstancias y edad del menor. Es común equiparar como sinónimos ambos términos, aunque la diferenciación entre uno y otro término se viene abriendo paso.
El pedófilo se interesa en la pornografía infantil y conoce que, socialmente, su predisposición es rechazada por la comunidad. Se esconde. No hace pública su condición. Los pederastas son pedófilos, aunque no todos los pedófilos son pederastas.
Es bastante común que los pederastas, sean los encontrados “in fraganti” o los denunciados, busquen excusas acerca de sus intenciones. Pueden explicar que sus acciones abrigan "valores educativos o moralizantes” o que las caricias carecen de malicia.

Un informe de Internet indica que suelen aducir que el niño es "sexualmente provocativo". En algunos casos, estos sujetos se tornan sádicos o dan muerte al menor. Hay pederastas que los colman de atenciones para obtener una complicidad operativa, que no los exponga.
Es relativamente frecuente que los pederastas victimicen a niños de su familia, ahijados o vecinos. En otras situaciones, son algunos preceptores con sus alumnos, especialmente en internados. Presionan a sus víctimas con la finalidad de que callen. Más sutil y, al mismo tiempo cruel, es hacer creer al menor que él también es “culpable”, o que “nadie le va a creer” si el asunto se divulga. Otras ocurrencias son las de padres con hijos, de educadores con alumnos, de entrenadores deportivos con pupilos,etc.

Variantes tan amplias no deben instalar la desconfianza, ni el prejuicio. La atención hacia los menores y la educación sexual, en los ámbitos de estudio y la familia, son los mejores antídotos.
También se habla de tratamientos.
Desde los años sesenta algunos países emplean la castración forzosa de los pederastas. Sin embargo, un tercio de los castrados quirúrgicamente, siguen siendo capaces de realizar actos sexuales.
La castración química, con sustancias que bloquean la producción de hormonas, parecen tener efecto en pederastas que, aún manteniendo sus impulsos eróticos, no tienen personalidad psicopática o antisocial. Fármacos antidepresivos causan la disminución de las apetencias. Los tratamientos con especialidades farmacéuticas deben ser complementados con los psicológicos.
Puede advertirse la amplitud de la cuestión. Apenas se han mencionado algunos elementos.
(11.06.08)

miércoles, 11 de junio de 2008

OREJAS DE ELEFANTE

Escribe Walter Ernesto Celina

INTIMIDAD RESGUARDADA

El título escogido puede inducir a que el lector piense que la nota se refiera a una de las singulares cualidades del mamífero terrestre más grande del planeta. Se verá que la cuestión de fondo no apunta hacia ahí.
La oreja, o pabellón auditivo externo, es una de las tres partes en que se divide el oído humano. Se trata de una membrana cartilaginosa, provista de un conducto que llega hasta el tímpano, ubicado ya al interior de la cabeza. El oído es responsable de las funciones de la audición y el equilibrio.
Así como en los humanos, las orejas en los animales se diferencian por sus formas y tamaños, lo también ocurre en los elefantes. En la especie india, son más chicas. En la africana subsahariana -son las dos clases de elefántidos que van quedando- tienen una dimensión considerable: pueden llegar a medir un metro y medio de largo. Operan como elementos para la ventilación y realización de señales visuales. Está comprobado que mediante sus trompas estas formidables bestias emiten sonidos de baja frecuencia, que son tomados por sus pares a distancias considerables. Una propiedad así no es regularmente percibida por los demás. Se trata de una comunicación sin interferencias. La especie goza de privacidad. Su comunidad se evade de penetraciones externas. Resguarda su intimidad. Sobrevive a ciertos riesgos.

ENTRE LA SATURACIÓN Y LA INOCENCIA

Uruguay es una plaza con saturación telefónica. Un procedimiento plebiscitario concedió, hace unos años, a la Administración Nacional de Teléfonos del Estado (ANTEL) el monopolio para la telefonía de línea, sin que se advirtiera que ya su preferencia decaía en el mundo de los usuarios. En cambio, facilitó que ANTEL habilitara la telefonía móvil, repartiendo el mercado entre su subsidiaria Ancel y compañías extranjeras.
En el año se gastan unos 500 millones de dólares por esta opción, reteniendo Ancel un 40% de los clientes, Movistar un 36% y Claro el 24%. El sistema abarca 3,4 millones de líneas, las que poseen una penetración casi del 100%. Circulan pues, más teléfonos celulares que uruguayos.
En calles, plazas, parques, comercios y domicilios una parte de los habitantes del país viven el frenesí de los mensajes de texto y, aunque menos, de llamadas inhalámbricas, lo que como verdadero aluvión invade cualquier espacio.
Nunca antes los uruguayos habían articulado tanto la electrónica con las porciones cartilaginosas de sus cabezas. Y nunca lo han hecho en medio de la mayor inocencia.

VIGILANTES INVISIBLES

En Uruguay existe una extensa gama de episodios relacionados con las escuchas telefónicas. Fuera de los trabajos dirigidos actualmente por agencias clandestinas, que supervisan con sistemas especiales todas las comunicaciones, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) es un centro activo de espionaje. Antes de la dictadura -atraída por el pachequismo- esta operaba desde la Jefatura de Policía de Montevideo, a través del Departamento de Inteligencia y Enlace. En la profundización de estos “servicios”, en el corazón del barrio de Pocitos, en Montevideo, una sala de registros acumulaba las conversaciones de embajadas diplomáticas, a través de los “pinchazos” en los cableados de la época.
En una memorable interpelación, en la Cámara de Representantes, Héctor Gutiérrez Ruiz y Mario Heber denunciaron el hecho como un acto de abierta injerencia extranjera, contra la soberanía nacional.
Gutiérrez Ruiz murió asesinado en Buenos Aires, en una noche de cuchillos largos en que también fueron víctimas Zelmar Michelini, Benjamín Liberoff, la pareja Barreto-Whitelaw, en una jornada en la que, asimismo, había merecido similar sentencia Wilson Ferreira Aldunate. La esposa de Heber moriría envenenada, tras recibir -como otros políticos de oposición- botellas de vino emponzoñadas.

¿Y AQUEL EXPEDIENTE?

Las escuchas clandestinas tuvieron franquicias totales bajo la dictadura “cívico-militar”. Ello motivó un expediente en ANTEL, donde jerarcas y técnicos aportaron informes comprometedores. Dicho legajo mostraba la extensión de los procedimientos y las maniobras hechas desde centros telefónicos oficiales. El legajo se perdió...! Nadie, nunca más, tiró de esa manta.
Parecería que los crímenes y la invasión de la privacidad estuvieran destinados a prevalecer.
Desde luego, no basta con la prisión de algunos déspotas que, como Álvarez, Bordaberry, Blanco y otros, han guardado total mutismo sobre actos de lesa humanidad y gravedad más que notoria.
Si la historia sufrida ha de servir para algo, es para recordar cómo se enlazan los procesos políticos y cómo el espionaje telefónico, en cualquiera de sus formas -antes o ahora-, es una práctica alentada por grandes centros de poder e intereses locales -a veces asociados-, que sienten ahogo en un régimen de libertades públicas.
Los vigilantes invisibles existieron y nuevas generaciones les van sucediendo.

PELIGROS ACTUALES

El clásico “pinchazo” ha dejado de ser, por supuesto, el que imperaba 35 años atrás, y aún antes. En la conservadora Alemania, el Estado -con directivas de la Comunidad Europea-, ordena almacenar por 6 meses los datos telefónicos. Guarda hora del contacto, identidad de los usuarios, duración de la conversación, etc. La “Deutsche Telekom”, que es uno de los primeros operadores de Europa, fue pillada sacudiendo sus grandes orejas sobre los usuarios. Espiaba a empleados de los “Supermercados Lidl” y a periodistas, gozando con el apoyo del gobierno, que participa con un 32% en la empresa, que es “mixta”...
Si es bueno saber cuáles son los riesgos que se corren, corresponde, en consecuencia, ponerse en guardia.
Las orejas de este elefante son bien grandes. Más que las del subsahariano.

miércoles, 4 de junio de 2008

MATILDE BIANCHI - LA POESÍA DEL CONTRAOLVIDO

Escribe Walter Ernesto Celina

En el calendario uruguayo, mayo y junio son dos meses que convocan a la emoción. No detienen el tiempo pero reavivan la historia. La atraen como una sucesión de instantáneas que movilizan la memoria y hacen al sano ejercicio de los recuerdos. De los que fusionan la afectividad y los ideales que ponen sentido a la existencia.
El 27 de junio de 1973 el bordaberrismo, asociado al militarismo reaccionario, abatieron las instituciones republicanas y, apenas unos meses después, en medio de un río de sangriento, la furia fascista promovía la liquidación física de hombres públicos y ciudadanos comprometidos en el alumbramiento de una sociedad más justa.

Zelmar Michelini es, sin duda, un símbolo de esta historia reciente -como se da en denominar-, tan cargada de demandas. Aquellos asesinatos fueron un 20 de mayo de 1976. Otros muchos, antes. Después vinieron más, todavía.
No por un subjetivismo exagerado y, menos aún, por un afán personalista del que nunca me sentí imbuido, he de ubicarme al borde de los acontecimientos para rememorar, con hechos vividos, un bello poema hilvanado por una gran mujer amiga, inspirado por otro fraterno amigo. Suyo y mío, como de tantos que lo amaron por sus virtudes cívicas.

Hablaré de la Prof. Matilde Bianchi y, por su voz lírica, asomarán sus versos “A Zelmar”, como ella los titulara.
En 1963 la izquierda levantó en el Senado una trinchera formidable. Desde allí, en memorables jornadas, un solo hombre, con una definición precisa en el plano ideológico, político y social, libró verdaderas batallas. Tuve el privilegio de ser su colaborador directo. Su nombre: Enrique Rodríguez.
La Prof. Matilde Bianchi, funcionaria de la Biblioteca del Poder Legislativo, llegaba a la bancada portando inquietudes intelectuales y trabajos de lingüística, de su especial predilección.
El senador Enrique Rodríguez, autodidacta desde su mocedad, portavoz de las causas laborales y tribuno de oratoria convincente y encendida, gustaba de la literatura española y sostenía que en los tangos anidaba la armonía de la poesía popular.
El Prof. Juan Carlos Legido, esposo de Matilde, analizaría la contribución de la orilla oriental al desarrollo de la música que, desde el arrabal, trepara a los empedrados urbanos.
El músico Lauro Fernández compartía las pláticas en medio de algún remanso en las jornadas senatoriales, cuando la política dejaba paso a la reflexión sociológica, literaria, poética, y al mismísimo tango, con referencias ineludibles a Gardel, Troilo o Pugliese. Este ejercicio era, casi, una exploración de la intimidad nostalgiosa de la que como uruguayos no renegábamos.
En el ambulatorio nos cruzábamos con la Dra. Alba Roballo, con su compañero de filas Michelini, con Eduardo Víctor Haedo, con Martín R. Etchegoyen y personal del entorno inmediato. Operábamos en espacios contiguos. Nos reconocíamos por la vecindad, por afinidades y por diferencias. Sin pensarlo hacia el futuro, tales características nos marcarían. Vientos de distintos cuadrantes agitaron cualidades excelsas y virtudes, defectos y errores, mostrando los intereses en juego en el eje contrapuesto oligarquía-pueblo.

Sobrevinieron sombras, docilidades, manos extranjeras.
Tras el golpe de junio de 1973, Matilde Bianchi emigra con destino a España. Es distinguida en la Universidad Complutense. Restablecida la democracia, retorna a su cargo en el Poder Legislativo.
Desde la secretaría de bancada que dirijo, en la Cámara de Diputados, desarrollo los argumentos que permiten sea reinstalada en su cargo de profesora en la enseñanza media.
Entre su obra édita se destaca la novela “A la gran muñeca”.
Matilde fallece de una afección asmática.
Tuve la calidez de su trato y el conocimiento de su sensibilidad..
Ella escribió por Zelmar Michelini estos versos, que “sin pena ni olvido” nos vuelven a una época cruda, de empeño por las libertades ciudadanas y los derechos de las grandes mayorías.

A ZELMAR

Entre la espada y pared tu nombre.
Dicen que tu nombre
como el clavel del aire
crece sin tierra
en el aire azul
sobre el mismo horizonte
que tus ojos amaron.
Entre la flor y la pared
en cada celda
tu nombre rayará la aurora.
Entre el clavel y la tortura
volará tu nombre entre los cardos.
Cómo decirte si ahora digo cardos
con mi voz ésta de argonauta
perdida de la nave
extraviada de vientos
de la patria estrella ya desorientada
solo parpadeante con ojos
sonámbula que fue
digo, tratando de ordenar
aquellas rosas cuajadas de rocío.
Hoy con tu nombre rosa
más rosas a la hora pendular
donde el pueblo levantó la mirada
hacia el mismo horizonte
que tus ojos amaron
la línea de azul rapiñada
esa rosa verde de mar y de arena.
Tú la conoces
por sus pétalos desangrados
caminante rubio de cenizas
hacia la desembocadura
sin respuesta
donde volará la rosa de tu nombre,
rosa que no perdona
de las tierras del sur.
Rosa de tu nombre entre las agonías
las mismas rosas de corazón partido
veremos enrojecer de frío
como escarcha en las manos abiertas
único pétalo de hielo
a la hora de los jueves del pueblo.
Más no. Si tus rosas hablaran
así será tan tuya aquella media voz
con los versos del Mago como magos del Plata
entre estertores y ausencias
y descabezadas victorias:
No habrá mas pena ni olvido.

sábado, 31 de mayo de 2008

LAS COSAS POR SU NOMBRE: PEDERASTIA

Escribe Walter Ernesto Celina

SOBRE ALGUNOS MALES URUGUAYOS

Sin duda que es muy grave lo que ocurre en el interior de muchas familias uruguayas en lo referente a las formas del maltrato infantil.
Toda sociedad, medianamente civilizada, debería apreciarse de proteger el desarrollo físico y psíquico de sus integrantes y, en particular, de su porción más débil e indefensa: la de sus niños.
Hemos sostenido en el discurso lo que no hemos cuidado en la práctica. Hemos desatendido los factores que hacen a una sana convivencia. Y, ahora y como por arte de magia, los problemas explotan en nuestras narices.
Fuimos tolerantes en no cuidar el trabajo nacional y en no articular políticas internacionales en defensa de bienes nacionales y regionales.
Hemos facilitado que administraciones sucesivas dilapidaran bienes colectivos. Usamos la denuncia como arma, pero no nos exigimos tanto -como debiéramos- para evitar que lo negativo y pernicioso se repita.
Así y por ejemplo, tardamos decenas de años en incorporar la educación sexual en la enseñanza y la seguimos ignorando en el hogar.
No potenciamos las aulas para que jueguen el papel transformador que pueden tener. Las hemos mantenido alejadas de los padres, la familia y la sociedad.
Hemos tardado demasiado en apuntalar a los núcleos con déficits de distinta índole y, cuando hemos llegado, a menudo, hemos colocado un parche fuera de tiempo.
Padecemos, entre otras cosas, de ineficiencia. Abundamos en el diagnóstico y, a la hora de obrar, no somos operativos. Cultivamos la incoherencia.

PEDERASTIA: VER LOS ÁRBOLES Y EL BOSQUE

Hasta ahora habíamos apretado los ojos ante algo que era conocido: eso que denominamos -casi eufemísticamente- maltrato infantil. Debimos señalar que la particular desviación, conocida como pederastia, está alojada en muchos hogares. Tal vez, en una proporción que no imaginamos. Por supuesto, tras cada puerta, el silencio se torna una cortina muy pesada.
En estos días nos hemos detenido más en los árboles que en el bosque, aunque importe -y vaya si interesa- que la gente sepa cómo, tantas veces, ciertas perversiones y conductas licenciosas pueden vincularse al crimen.
No somos una sociedad educada sexualmente. Hemos sido hipócritas y nos hemos mentido. No se puede tapar el sol con una mano, como para que no imperen los rayos de luz.
Hablamos de la niña de Maldonado, vejada y asesinada; de padres prostituyendo a su hija, del “ojo por ojo y diente por diente” en la cárcel de Tacuarembó, del violador de Rivera, de tal “abuelo” o “padrastro”, del monstruo holandés José Fritzl, etc., ¿y después?

¿Qué medidas urgentes y de emergencia se van a dictar? ¿Y las de fondo?
¿Cuáles son las acciones y programas institucionales, oficiales y privados?
¿Se conoce alguno proveniente de un órgano de educación, de algún centro asistencial, de núcleos profesionales (médicos, psiquiatras, psicólogos, educadores, etc.)?
Si algo se ha hablado es probable que, aún, se mantenga entre cuatro paredes.
¿Qué nos hace ser tan lentos e irresolutos?
¿No somos capaces de mirarnos a nosotros mismos? ¿Por qué no nos preguntamos cuándo y cómo vamos a actuar y de qué manera nos ayudaremos?
¿Queremos, acaso, continuar con el fragelo encima?

SOBRE EL ABUSO INFANTIL

El abuso sexual infantil no lo inventamos los uruguayos. Se sabe.
Existe desde tiempos remotos, lo que no es excusa.
En la Grecia clásica era frecuente el contacto homosexual de varones con prepúberes.
En Roma, los hijos de los esclavos podían ser destinados para usos pederásticos (pueri meritorii, ephebi, concubini, fellatores).
La pedofilia (pederastia) consiste en excitarse sexualmente con fantasías, visiones o contactos con niños, de 13 o menos años. Se considera que el abusador debe tener, al menos, 5 años más que la víctima.
Existe toda una gama de formas de pederastia: desde desvestir al menor y/o acariciarlo hasta someterlo a actos de sexo vaginal, anal u oral, en forma activa o pasiva.
El trastorno ocurre, predominantemente, en varones (nueve a uno en comparación con mujeres). Algunos pederastas son incapaces de mantener relaciones con adultos.

LAS SECUELAS

En Uruguay, uno de los escasos estudios sobre las secuelas del aprovechamiento sexual infantil reveló, para un universo limitado de menos de 40 pacientes, en una clínica psiquiátrica, que un 86% de las víctimas habían sido abordadas por familiares y que en un 90% los hechos no trascendieron, ni adoptaron la forma de denuncia. 9 mujeres fueron violadas, 7 fueron objeto de masturbación, 6 tuvieron sexo oral y otras, vistas pornográficas y manoseos.

Respecto de las consecuencias, fue general la adquisición de una postura pesimista ante la vida; 29 padecieron cefaleas y trastornos ginecológicos, 12 depresión, 4 estrés postraumático, 5 trastornos alimenticios, 4 alcoholismo y drogadicción. Alteraciones en la sexualidad se manifestaron en todos los casos. El abuso sexual infantil conlleva, ciertas veces, lesiones duraderas en el eje hipotalámico-hipofisiario-adrenal, con repercusiones disociativas y de la memoria.
La cuestión ha sido apenas esbozada dentro de los límites de esta nota.
Personas especializadas debieren opinar con la autoridad de sus estudios.
Hay que abrir un debate sin tabúes. Con la gente y para la gente, que somos todos.

martes, 20 de mayo de 2008

CRIMEN EN BUENOS AIRES

Escribe Walter Ernesto Celina

Se le vio, caminando entre fusiles,
por una calle larga,
salir al campo frío,
aún con estrellas, de la madrugada.

Antonio Machado – Fragmento El crimen


TRES HOMBRES ÍNTEGROS

Sobre cada 20 de mayo las lumbres del recuerdo se avivan. La sangre derramada pide la explicación que no llega. Autores intelectuales y ejecutores materiales de los más brutales asesinatos políticos del siglo XX son sombras entre las sombras. No viven, apenas reptan. Comulgan en la impunidad de una moral amorfa, matrizada en las escuelas de la “seguridad nacional”.

Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruiz y Manuel Liberoff fueron personas de mi conocimiento y de trato político asiduo.
El primero, senador y cofundador de la coalición de fuerzas de izquierda, en la que oficié como secretario técnico en sus horas iniciales.
El segundo, Presidente de la Cámara de Representantes, ciudadano entrañable, con quien estuve en contacto como secretario parlamentario.
El tercero, médico y militante de organizaciones políticas y sociales con las que tuve afinidad.
Los tres, hombres íntegros, a carta cabal. Uruguayos con perfiles distintos y cualidades que amalgamaban firmeza de ideales, pasión por el debate enaltecedor, espíritu solidario y amor a la libertad.

Tras el golpe de estado de Juan María Bordaberry y las fuerzas armadas, del 27 de junio de 1973, el exilio en Buenos Aires fue la vía que quedó expedita para estas tres personalidades y decenas de connacionales.
Cabe recordar que, el 20 de mayo de 1976, a los tres muertos citados, se les sumaron dos más: Rosario Barreto y William Whitelaw Blanco.
Wilson Ferreira Aldunate, líder indiscutido del Partido Nacional de aquella hora, lo mismo que otros legisladores opuestos al golpismo, habían buscado refugio en la vecina orilla.
En ocasiones diversas, en el ámbito parlamentario dialogué con el talentoso hombre público. Fui testigo de su irresistible ascenso político.
En circunstancias en que su vida también corría peligro, dirigió una extensa carta al dictador argentino, teniente general Jorge Rafael Videla, No fue para hablar de sí, aunque su secuestro y asesinato, como el de sus amigos parlamentarios, estaba planificado.

La comunicación de Ferreira Aldunate es un extraordinario documento de época, digno de ser evocado.
Condensa por su forma, como por su contenido, la esencia de la intrepidez uruguaya cuando debe alzarse la voz por la libertad y la vida, por muy difícil que sea la hora. Trasunta la pulsación de los que aman los derechos ajenos como propios, de los que sienten el verbo de la fraternidad en la lucha por el destino de un país. A el me referiré.


PREANUNCIO DE MUERTE

En una misiva del 5 de mayo de 1976, Zelmar Michelini le manifiesta a Roberto García, de “La Opinión”, de Buenos Aires: “En estos días he recibido amenazas telefónicas anunciándome un posible atentado y además, un traslado por la fuerza y contra mi voluntad a Uruguay.
Me llega, asimismo, información que el ministro uruguayo (Juan Carlos Blanco) plantearía ante las autoridades argentinas la necesidad de que se me aleje de este país…”
El 18 de mayo, a las 02:30, seis personas vestidas de civil derriban la puerta del apartamento de Héctor Gutiérrez Ruiz, en el céntrico Barrio Norte de la capital argentina.
Encapuchan al dueño de casa y se alzan con cinco valijas repletas de bienes.
-“Si avisa a otros uruguayos, especialmente a Zelmar Michelini, matamos a su marido”, le espetan a Matilde Rodríguez Larreta, la esposa.
Poco después, un grupo secuestrador toma posesión de la habitación 75 del Hotel “Liberty”, en Corrientes y Florida.
-“Zelmar: Te venimos a buscar. Ha llegado tu hora…”, grita un esbirro.
Le vendan los ojos y lo sacan a puntas de metralletas. Hurtan efectos diversos.
Mensajes telegráficos caen sobre la Casa Rosada desde diversas partes del mundo. Requieren garantías para la vida de los secuestrados.
El gobierno promete investigar…


WILSON FERREIRA ALDUNATE INTERPELA AL DICTADOR

En una corajuda comunicación al teniente general Jorge Rafael Videla, el senador Wilson Ferreira Aldunate documenta, para la historia de las grandes infamias, la sucesión de episodios que condujeron al asesinato de los dos legisladores uruguayos.
Su estocada va al corazón del régimen que avasallaba los fueros del pueblo hermano, bajo la siniestra coordinación conocida como “Plan Cóndor”.

He aquí algunos pasajes memorables, tomados de la carta fechada el 24 de mayo de 1976:


CONFIANZA EN LA NACIÓN ARGENTINA

“Sr. Presidente: Dentro de pocas horas buscaré el amparo de la embajada de un país democrático, cuyo gobierno respeta las normas que rigen la conducta de las naciones civilizadas. Antes de hacerlo, tengo el deber de escribirle estas líneas. No sé si llegará a leerlas, pero creo que le haría bien hacerlo.
Hace tres años, a consecuencia de los acontecimientos políticos ocurridos en Uruguay, Héctor Gutiérrez Ruiz, Zelmar Michelini y yo, uruguayos los tres, confiamos, como multitud de otros compatriotas, nuestra seguridad y la de nuestras familias a la protección de la bandera argentina. Poco o nada nos importó, entonces ni después, cual fuera el gobierno o el régimen político que imperara en este país, pues en quien depositamos nuestra confianza fue en la propia nación.”



HÉCTOR GUTIÉRREZ RUIZ

“Héctor Gutiérrez Ruiz es -porque eso no puede quitárselo nadie- el Presidente de la Cámara de Representantes del Uruguay. Representa en ella al Partido Nacional, a pesar de un comunicado expedido desde Montevideo por quienes se ceban, como algunos animales inmundos, en los propios cadáveres.
La condición de integrante del Partido Nacional, de blanco, como decimos los Orientales, la damos y la quitamos los blancos mismos, y no está al alcance de los enemigos de su patria y de su partido.
Tenía 43 años y presidía una maravillosa familia cristiana que integraba con su mujer y sus cinco hijos. Todos vivían, desde 1973, en Buenos Aires.”



ZELMAR MICHELINI

“Zelmar Michelini es padre de diez hijos, y también desde 1973 trabajaba de sol a sol para mantener a su mujer y sus hijos pequeños, y para ayudar a los un poco más grandes, que todos son muy jóvenes. Diputado, ministro, senador, siempre militó en filas políticas distintas que las de Gutiérrez y mías. Pero todos sentimos siempre por él un inmenso respeto, que se volvió, hace ya bastantes años, amistad entrañable.”


CONTRA LA VIOLENCIA INJUSTA

“Toda mi vida política se desarrolló, Sr. Presidente, cerca de estos hombres: uno al lado, y el otro enfrente. Pero en lo que nunca discrepamos fue en la necesidad de combatir toda forma de violencia injusta, cualquiera fuera su origen, y de afirmar la libertad y la dignidad de toda criatura humana.
Organizaciones democráticas, en los más diversos países, hombres destacados de todas las nacionalidades, su santidad el Papa y muchos gobiernos (entre los que no se contaba, desde luego, el de su propia patria), ponen en juego todos los medios para obtener la liberación de los secuestrados.”

NO REGISTRAN DENUNCIAS DE LOS SECUESTROS

“El gobierno argentino manifiesta que “en ciertos casos no existen las respectivas denuncias ante las comisarías de la Capital Federal”. No es verdad. Las denuncias existieron, pero la policía se negó a tomar constancia de las mismas. Inmediatamente después de llegar a su casa los primeros amigos, la Sra. de Gutiérrez Ruiz compareció ante la comisaría de policía correspondiente a su domicilio, sita en la calle Suipacha 1156, donde recibió una cerrada respuesta a registrar su denuncia ya que se le dijo, “era sólo desperdiciar papel”. Todo esto ocurrió en presencia del Representante en la Argentina del programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, antiguo amigo de la familia, En estas circunstancias, la Sra. de Gutiérrez Ruiz se dirigió a las Oficinas Centrales de Telégrafos, a fin de enviar telegramas al Ministerio del Interior, al Jefe de Policía, a los Comandantes de la Armada y la Fuerza Aérea y a Ud., Sr. Presidente, pero dichos telegramas no le fueron aceptados por carecer de documentos. De nada valió el argumento de que los asaltantes se los habían llevado, conjuntamente con los de toda la familia, ni el ofrecimiento de quienes le acompañaban, que exhibieron su propia documentación, de hacerse responsables del texto de los telegramas y de la identidad de quien los expedía.
La señora debió volver, entonces a la Seccional 15ª. de Policía, a denunciar el hurto de sus documentos, pero, nuevamente, las autoridades policiales se negaron a recibir la denuncia, ya que quienes hurtaron o “retiraron” las cédulas de identidad podrían ser policías. Luego de muy larga discusión, se aceptó la manifestación de que habían sido “extraviados”, y con esta constancia, la señora pudo al fin volver al Telégrafo y enviar sus mensajes.
Exactamente la misma pesadilla vivieron los hijos del senador Michelini y quienes los acompañaban.
Al cerrarse la noche que va del 18 al 19 de de mayo, la policía no ha aceptado denuncia alguna; ningún agente se ha hecho presente en los lugares de los hechos; el juez federal competente no ha ordenado ninguna diligencia o pericia; no se ha recibido contestación a ninguno de los telegramas enviados, entre ellos, el que se encuentra dirigido a Ud., Sr. Presidente; las huellas dactilares de los criminales están esperando ser reveladas, en un país donde todos los habitantes -nacionales y extranjeros- tienen las impresiones de sus diez dedos archivadas y clasificadas en un registro único de carácter nacional. Aunque entonces, ni sus familiares ni sus amigos lo sabíamos, a Zelmar Michelini y a Héctor Gutiérrez Ruiz les quedaban 48 horas de vida.”

UN 20 DE MAYO FATÍDICO

“El día 20 de mayo no ocurrió, aparentemente, nada nuevo, salvo la progresiva angustia de todos, familiares y amigos uruguayos y argentinos que seguían los acontecimientos en Buenos Aires, así como de aquellos que hacían llegar su emotiva solidaridad desde el exterior. Una fuente reservada, pero de nuestra confianza, nos había hecho saber que los dos compatriotas estaban presos en una unidad militar. Pero las fuentes oficiales insistían en negar todo conocimiento de los hechos.
A la noche, en una recepción, el Ministro de Defensa, brigadier mayor (r) José María Klix, formuló, primero a un corresponsal extranjero, y luego a otro, la misma sorprendente manifestación a la que me he referido al comienzo de esta carta: “Se trata de una operación uruguaya”, y agregó, en forma aún más increíble: “Todavía no sé, si oficial o no.”


ESTAN SIENDO ASESINADOS

“Las familias de ambos no han recibido aún contestación a sus mensajes, ni del Ministro del Interior, ni del Jefe de Policía, ni de los Comandantes en Jefe de la Fuerza Aérea, ni de Ud., Sr. Presidente. No saben que en estos momentos estos dos hombres, que eran y son orgullo de mi país, están siendo asesinados en la forma repugnante y sucia en que lo fueron, y que no le describo porque Ud. ya debe saberlo, Sr. Presidente, y porque me costaría demasiado hacerlo.
Familiares y amigos ven disminuir, cada vez más, sus esperanzas, pero aún no saben que hace ya 24 horas que fueron asesinados Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz, y que sus cuerpos habían sido “encontrados” por la policía.”

UD. NO CONTESTÓ

“Ud. no consideró necesario contestar ninguno de los mensajes que se le dirigieron. Ninguna autoridad o miembro de su gobierno expresó su pena o presentó sus condolencias a los familiares de estos huéspedes ilustres de la República Argentina, vilmente asesinados en su suelo.
Y nadie pensó siquiera en notificar a las familias de las víctimas, para evitar que recibieran la noticia en la calle, leyendo los diarios u oyendo la radio. La única referencia que tuvieron de Ud., Sr. Presidente, fue la notificación de que el telegrama que se le dirigió, recién le fue entregado el día 24 y de que su señora, Sr. Presidente, se había negado a recibir el que le estaba destinado.”

UN COMUNICADO REPUGNANTE

“Me he abstenido, deliberadamente, de hacer calificativos, pero nadie vacilará en decir que el comunicado expedido por la Policía Federal es repugnante.
Como se ve, los asesinos intentan atribuir sus crímenes a la subversión y vincular los muertos con ella. No me detengo siquiera a considerar esta posibilidad: no hay un solo uruguayo o argentino decente que crea en ella; quizá por eso mismo nadie, ni siquiera los autores del comunicado, han insistido en la versión.”

ABYECCIÓN PARA APUNTALAR LA MENTIRA

“Pero sí quiero decirle algo sobre los otros dos compatriotas cuyos cuerpos sin vida fueron “encontrados” junto a los de nuestros amigos. No los conocía. Se dice que pertenecían a una organización guerrillera, pero no tengo ningún modo de saber si ello es cierto o no. Pero, si tal fuera el caso, resuelta evidente que se los mató al sólo efecto de hacer aparecer a nuestros amigos como vinculados con la guerrilla. Y no sé si esto no es lo más abyecto de todo este sucio episodio: quitar la vida a dos seres humanos por la única razón de apuntalar una mentira.”

PERSECUCIÓN POLICÍACA

“La policía argentina ha ido a buscarme a mi casa hace unas pocas horas. Hace ya varias noches que no duermo en ella y, como le dije, buscaré ahora en amparo de la embajada de un país cuyo gobierno se respeta a sí mismo, y por ello respeta y ampara la vida humana.
Cuando llegue la hora de su propio exilio -que llegará, no lo dude Gral. Videla-, si busca refugio en el Uruguay, un Uruguay cuyo destino estará nuevamente en manos de su propio pueblo, lo recibiremos sin cordialidad ni afecto, pero le otorgaremos la protección que Ud. no dio a aquellos cuyas muertes hoy estamos llorando.”
Y firma: Wilson Ferreira Aldunate.


CON LA VIDA EN UN HILO

La hidalguía del senador compatriota no se agota en el magistral documento contra el crimen político que lo enfrenta, de por sí y en solitario, al dictador militar y sus verdugos.
El periodista César Di Candia, amigo de la familia Michelini, llegó en la hora aciaga al domicilio montevideano del asesinado.
En medio de la congoja y del incesante sonar del teléfono, registra este diálogo de un hermano del senador muerto con un interlocutor, al habla desde Buenos Aires:
-“Andate de ahí. No te quedes más. Te estás exponiendo. No tenés necesidad. Te van a ir a buscar en cualquier momento. Yo salgo para ahí en un ratito, voy en un avión taxi. Te lo pido por favor, cuidate, no seas loco.”
Repitió los conceptos. Cortó. Al darse vuelta miró a familiares y amigos y recordó:
-"Estaba hablando con Wilson. No quiere separarse del cadáver de Zelmar hasta que yo llegue. Es un amigo increíble.”

Con gestos como estos se escribió la historia reciente del pueblo uruguayo.
Con esta savia se nutre el árbol de la libertad.


lunes, 12 de mayo de 2008

RENUNCIAMIENTO DEMOCRÁTICO - NOTA 1

Escribe Walter Ernesto Celina

La recuperación democrática uruguaya costó sangre, sudor y lágrimas y, tras uno de los capítulos más aciagos de la historia nacional, pesa una herencia deformadora de la que el país tarda en recuperarse.
Crímenes repugnantes están para esclarecerse. ¿Se desentrañarán? ¿Se conocerán a sus autores? ¿Qué punición tendrán?
Un tiempo de impunidad, de varias décadas, ha ido transcurriendo y continúa quemando años, como para perfeccionar un infamante olvido.
Sentenció Artigas que es muy veleidosa la probidad de los hombres. ¡Y vaya si lo será! Para ello se crearon las vallas constitucionales en el Estado Republicano, las que se refuerzan con la historia escrita por el mismo pueblo, artífice, cultor y sostén de las garantías para las libertades públicas.

En el Uruguay moderno, Brum y Grauert rindieron su tributo y, más acá, en un escenario reciente, mártires, desaparecidos, torturados y confinados en cárceles, exiliados y uruguayos que no emigramos, sorteamos -cada cual en su medida- los avatares de un período cruel, en que la fuerza bruta colmó desde el Estado todas las medidas imaginables, generando un poder policíaco-militar sórdido, tenebroso.
¿Alguien puede ser tan flaco de memoria, o tan hipócrita, como para no valorar, como corresponde, una era ignominiosa y soslayar la aterradora experiencia vivida?
Si el pachequismo (con el apoyo del resto del coloradismo y del etchegoyenismo nacionalista), gobernó a la sombra del régimen excepcional de medidas prontas de seguridad, torturando, encarcelando y persiguiendo ciudadanos, instalada la dictadura cívico-militar con Bordaberry, muertos el Poder Judicial y el Parlamento, se pasó a vivir en el reino de las Fuerzas Conjuntas, es decir, bajo el imperio del garrote cesarista.
La Constitución ya no existía. Había sido puesta de costado, de modo progresivo, primero. En forma desembozada, después.

Todo gobernante debe de saber que la Constitución obliga a que se la acate y que toda ley, partiendo de su iniciativa o proyecto, debe ser considerada inviable, en cuanto la ataque.
Con referencia a la ley en ciernes, sobre Procedimiento Policial, si en el inicio Poder Ejecutivo y, luego y por su orden, la Cámara de Senadores y la de Diputados, han estado contestes en desconocer la Constitución en su Artº 11, arrasando el concepto de inviolabilidad del domicilio, hay una doble conclusión inmediata. La primera, es que para nada les ha servido la mejor tradición constitucional republicana y, luego, que la historia reciente (sobre la que tanto se hablara) tampoco ha contado. Desde el olimpo oficialista se le ha dado vuelta la espalda.

Tal la conclusión que se desprende del aberrante Proyecto de Ley de Procedimiento Policial, a punto de ser sancionado por la Cámara Alta.
Porque, fuera de su inconstitucionalidad manifiesta, lo que se arrasa no es poco, aún para el más incipiente lector de la Carta Magna: Artª 11. El hogar es un sagrado inviolable. De noche nadie podrá entrar en él sin consentimiento de su jefe, y de día, sólo de orden expresa de Juez competente, por escrito y en los casos determinados por la ley.
La materia debe ser profundizada para conocer los detalles de un acto político que implica un renunciamiento democrático y el abandono de principios, que se suponían irrenunciables en ciertos ámbitos.
Como queda visto, el poder chamusca hombres e ideas.
En el siguiente análisis, la lupa se detendrá para observar algunos de los efectos del nefasto proyecto. Un verdadero engendro.

waltercelina1@hotmail.com

ATAQUE A LA INVIOLABILIDAD DOMICILIARIA - NOTA 2 (Final)

Escribe Walter Ernesto Celina

Se encuentra en el Senado, a punto de ser convertido en ley, el denominado Proyecto de Procedimiento Policial.
Trátase de una iniciativa formulada por el Poder Ejecutivo, con una sanción primaria del Senado, y una segunda -con modificaciones-, de la Cámara de Representantes, que la ha vuelto a la Cámara Alta.
No vacilo en calificar este instrumento para la acción policial como un gravísimo traspié del gobierno que encabeza el Dr. Tabaré Vázquez.
Es inconstitucional por su forma y antidemocrático por su contenido.
Hace descaecer garantías fundamentales, salvaguardadas por la Constitución Nacional desde 1830, referentes a la seguridad personal y a la intimidad.
Conviene recordar el texto preciso e incontrovertible del Artº 11 de la Carta Magna vigente, que transcribo, desagrego y subrayo, para que se observe su alcance, parte por parte:

-El hogar es un sagrado inviolable.
-De noche nadie podrá entrar en él sin el consentimiento de su jefe,
-y de día, sólo de orden expresa de Juez competente, por escrito y en los
casos determinados por la ley.

Contraviniendo los precedentes enunciados, el proyecto barre cada uno de los preceptos.
Más: Autoriza el arresto de personas no sospechosas que no dieren datos identificatorios suficientes, o sobre los que el agente pueda estimar que no sean ciertos. Ello determinará sean conducidas (detenidas), con posterior comunicación al juez. Se impone el deber de obediencia a los funcionarios policiales, a quienes se les concede la potestad de hacer uso de la fuerza cuando no puedan inmovilizar o detener vehículos, estén vestidos con uniforme, o de particular debidamente identificados... Se estatuye la incomunicación de testigos y víctimas, en las operaciones de detención previa.

Para todo esto se reviven normas derogadas, correspondientes al decreto 690/980, de la dictadura y se contravienen numerosas normas de rango constitucional, de los Códigos Penal, del Proceso Penal y de la Niñez y Adolescencia. Se choca con la Declaración Universal de los DD. HH. y con el Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos.
No sólo es un adefesio jurídico, sino un arma letal contra los derechos del ciudadano y un resorte para la extralimitación del poder coercitivo. Con razón, es una materia que los especialistas, en los ámbitos de la academia y del foro, analizan con inocultable acidez crítica.
Desde un ángulo político general, puede sostenerse, sin lugar a dudas, que esta legislación -a punto de plasmarse- supone un ataque a las libertades y a un derecho fundamental que hace a la intimidad del hogar.

Según quedó establecido en la exposición de motivos del Poder Ejecutivo, el articulado tuvo su origen en un grupo de trabajo integrado por policías de distinto grado, profesionales de diferentes especializaciones y particulares, con la consulta a la totalidad de las unidades ejecutoras que integran la Policía Nacional, que fueron las que dieron forma al proyecto que finalmente quedó consolidado por las autoridades del Ministerio del Interior.

Por un acto mágico, el Ministerio del Interior ha pasado a ser lo que no debió y, el gobierno, muy dócil, se ha plegado a la orientación que le imprimen sus cuadros.
¿Qué cuadros? Los jerarcas matrizados en la dictadura, muchos de los cuales fueron catapultados a las Jefaturas de Policía.
Los mismos, sobre lo que hace muy poco tiempo llevó a sostener a un senador, del grupo mayoritario en el gobierno, que los jefes de policía deberían ser designados según su adhesión a la línea del gobierno y no por una supuesta “profesionalidad”, identificada con un pasado de represión.

Ya he recordado, en nota anterior, el apotegma artiguista: es muy veleidosa la probidad de los hombres.
Para ello está el freno de la Constitución, la exigencia de su pleno y total acatamiento y la demanda que impere una política de principios, en el gobierno y en la oposición.
Levantar voces, serenas, firmes y sin banderías, es una tarea de la hora.

waltercelina1@hotmail.com

miércoles, 7 de mayo de 2008

PIEDRAS EN LOS ZAPATOS DEL PAPA - NOTA I

PEDERASTAS EN EL CLERO
Escribe Walter Ernesto Celina

PRESENTACIÓN DE LOS TEMAS

La situación de la Iglesia Católica en los Estados Unidos se ha tornado compleja. La reciente visita del Papa Benedicto XVI a dicho país se asemeja a un espaldarazo al presidente George W. Bush y hace sintonía con la visión conservadora por la que transitan el jefe del imperio y el pontífice germano.
Dos guijarros dificultaron la marcha papal por los tersos escenarios en que fue recibido.
La primera piedra en el zapato motivó que el príncipe eclesiástico tuviera que referirse al mal manejo y al ocultamiento que las jerarquías católicas norteamericanas hicieron de las denuncias que involucraron a sacerdotes en escándalos de abuso sexual a menores de edad, configurando casos flagrantes de pedofilia.
El otro guijarro, molestando su pie, fue su adhesión implícita a la versión bushiana de cómo se produjo el atentado a las Torres Gemelas del World Trade Center y, por efecto inmediato, de la guerra contra el terrorismo.
Ambos puntos rozan áreas sensibles de la opinión pública en EE. UU. Y motivan interés y rechazos en el exterior.
Hay mucho paño para cortar y habrá que ir por partes. En este segmento se abordará la cuestión de los sacerdotes y eclesiales, incursos en vejámenes contra niños y adolescentes.

ABOMINABLES VEJÁMENES

La palabra pederastia (o pedofilia), viene del griego. Significa tendencia hacia los niños. Caracteriza la actividad sexual con prepúberes, de ambos sexos, por lo general, de 13 o menos años de edad. Se considera que el trastorno es tal cuando el individuo que lo ejercita tiene, al menos, 5 años más que su víctima.
En la mayor parte de los Estados de USA el delito de pederastia se configura a partir de los 16 años, o sea cuando el individuo es responsable en el ámbito penal.
Los desenfrenos en la Iglesia Vaticana, relacionados con abuso sexual contra menores, han tenido repercusión desde la segunda mitad del siglo XX, aunque la notoriedad cobró singular auge en el último lustro de 1990. Las víctimas, entonces, se presentaron ante tribunales y medios de difusión de Estados Unidos, Europa y América Latina, donde la Iglesia Católica Apostólica Romana ha tenido y mantiene una influencia manifiesta.

Un informe de la BBC de Londres, de 2004, indicó que el 4% del clero católico, en los últimos 50 años, en Estados Unidos ha estado implicado en prácticas sexuales con menores, en número superior a los 4000 sacerdotes,.[
Para Bárbara Blaine, presidenta de la Red de sobrevivientes de abusados por sacerdotes (SNAP- USA), ]sólo presentan acusación entre el 5 y el 10 por ciento de las víctimas.
Un reporte de la Junta Nacional de Revisión (National Review Board) confirmó que un total de 4.392 sacerdotes fueron imputados de inconducta sexual contra 10.667 menores, entre 1950 y 2002.
De dicho total, aproximadamente 6.700 víctimas exhibieron pruebas. 3.300 sumarios no se procesaron por fallecimiento de los sacerdotes. Unos 1.000 ofendidos no ofrecieron testimonios firmes para profundizar las actuaciones.
[Los datos anteriores inducen a la desautorización de un informe de Philip Jenkins, profesor de Historia y Estudios Religiosos de la Universidad de Pennsylvania,[ ] para quien el 99,8% de los sacerdotes nunca se habrían visto implicados en esta modalidad de comportamientos delictivos.

COSTO EN LOS ESTADOS UNIDOS

Los costos relacionados con estos problemas superaron, en principio, los 570 millones de dólares en concepto de gastos legales, indemnizaciones, terapia para las víctimas y tratamiento para los infractores.
La cifra no incluye los 85 millones de dólares que pagó la Archidiócesis de Boston para resolver algunas de las demandas presentadas por las víctimas. El guarismo citado se habría multiplicado en grado astronómico, llegando a los 2.000 millones de dólares. La circunscripción católica mencionada, la cuarta más grande de EE.UU. y en donde comenzó la avalancha de denuncias, a finales de mayo de 2005 anunció el cierre de 65 de sus 357 parroquias.

CONCLUSIÓN DE LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA

Más investigaciones, como la realizada en 1995 por la Universidad de Salamanca (publicada por el Ministerio de Asuntos Sociales de España), determinó que del total de españoles que han soportado vejaciones siendo niños, el 10% asegura que fue violentado por un sacerdote católico. [ ]La mayoría de los aberrantes hechos ocurrieron en seminarios, escuelas y orfanatos, donde los prepúberes estaban bajo atención de clérigos.

POLÍTICA DE ENCUBRIMIENTO

La publicación de los deplorables hechos creó una fuerte crítica hacia las jerarquías de la Iglesia. En especial, por la actitud que algunos obispos y superiores religiosos asumieron frente a las evidencias fácticas, limitándose, apenas, a llamados de atención privados y al traslado de los infractores a otros sitios.
Respecto de los agredidos, se guardó una indiferencia sistemática, lo que llevó a la conclusión que los mandos actuaban como encubridores de los predicadores pervertidos.
El Papa Benedicto XVI, en una línea similar, sostuvo en su último viaje que la cuestión fue mal gestionada. Y escurrió, también, el bulto.

PENALIDADES Y EXTENSIÓN DEL PROBLEMA

El Código de Derecho Canónico -compendio del derecho católico-, fija penas para los delitos que tienen que ver con el abuso sexual. Según el artículo 1395, el clérigo que incurra en agresión sexual contra un menor, sea por medio de violencia o amenaza, será castigado con penas “justas” que pueden llevar a la privación del estado clerical.[
Las evidencias de este crimen por parte de religiosos es muy anterior al siglo XX. Existen documentos eclesiásticos que buscan prevenirlo, como la constitución apostólica Sacramentum Poenitentiae, de 1741.
Cabe decir, finalmente, que la situación no es sólo concerniente a la Iglesia Católica: afecta a instituciones y organizaciones en que adultos tienen contacto directo con menores.

PIEDRAS EN LOS ZAPATOS DEL PAPA - NOTA II

ATENTADOS DEL 11-S BAJO SOSPECHA
Escribe Walter Ernesto Celina

La presencia del Papa Benedicto XVI en el área en que ocurriera el atentado a las torres del World Trade Center, el 11 de septiembre de 2001, más que un acto de piedad puede interpretarse como una convalidación de la versión oficial norteamericana de cómo ocurrieron los trágicos hechos.
Si la primera piedra en la sandalia pontificia estuvo dada por la inevitable referencia a los escándalos de pedofilia que sacudieron a la Iglesia Católica de los Estados Unidos, el segundo corpúsculo dificultando su marcha ha sido la aceptación del discurso de la administración de George W. Bush, con sus apocalípticas consecuencias.
Pero, en la sociedad imperial, ya no existe una única óptica. La impopularidad de Bush, al culminar su mandato, lo exhibe como un presidente con una raquítica aceptación.
El mandatario está aislado de la opinión pública nacional e internacional. Ha actuado al servicio de los intereses de las corporaciones que atizan guerras de rapiña, con saldos descomunales de dolor y muerte.
La interpretación única e incontrovertible de la primera hora no existe más.
El Papa Benedicto XVI no se interroga como lo hace cada vez mas gente. Él se alinea bajo las banderas del gobernante más cuestionado de nuestro tiempo.
Vale hacer un repaso de opiniones significativas, volcadas en los más diversos medios, para comprender o, al menos saber que, junto a la historia oficial, existe otra distinta: la que cambia la titularidad de los actores de una masacre sin precedentes.


FIGURAS DEL ESPECTÁCULO DISIENTEN CON BUSH

Sharon Stone, galardonada en 1996 con el Oscar a la mejor actriz, declaró: “Yo nunca creí la historia que nos han contado acerca de la destrucción de las Torres Gemelas, el 11 de septiembre.”
En igual dirección y con la misma desconfianza, se han pronunciado personalidades de Hollywood: Martín Sheen (6 Emmy Awards y 1 Golden Globe) y su hijo, Charlie Sheen (2 Golden Globe); la actriz francesa Marion Cotillard (1 Oscar); el escritor escenógrafo Robert Baer; el realizador Michel Moore (1 León de Oro), el músico de rapp Mos Def (1 Emmy Award y 1 Golden Globe) y otros calificados artistas.


NOAM CHOMSKY POR LA DESCLASIFICACIÓN DE DOCUMENTOS

El lingüista y analista de las políticas invasivas de los Estados Unidos, Prof. Noam Chomsky, quien inicialmente compartiera el relato de administración republicana sobre los atentados, dio su apoyo a “las viudas del 11 de septiembre”, las que solicitan la desclasificación de una serie de documentos anteriores a la catástrofe, así como de partes censuradas en informes oficiales. Chomsky defiende la legitimidad de la posición de quienes desconfían de Bush.


EX PRESIDENTE ITALIANO COSSIGA: FUERON LOS SERVICIOS DE INTELIGENCIA

Francisco Cossiga, ex presidente de la República de Italia, formuló esta categórica declaración: “El rey está desnudo. Como lo saben todos los dirigentes occidentales -aunque ninguno lo dice- fueron los servicios de inteligencia estadounidenses e israelíes los que perpetraron los atentados del 11 de septiembre de 2001.”
Para el político italiano acusaron de terrorismo a los países árabes para atacar a Afganistán e Irak.


RELATOR ESPECIAL DE LA ONU SOLICITA INVESTIGACIÓN

El Prof. Richard Falk, relator especial del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, reclamó la creación de una comisión investigadora internacional sobre el papel de los neoconservadores en los atentados del 11 de septiembre de 2001.
El 26 de marzo de 2008, Falk, Prof. Emérito de Derecho Internacional en la Universidad de Princeton, fue electo por unanimidad para ejercer un mandato de 6 años a fin de realizar el seguimiento de la cuestión de los derechos humanos en los territorios palestinos.
Es el autor del prefacio de la edición estadounidense de New Pearl Harbor, obra del Prof. David Ray Griffin, considerada como el más importante estudio sobre el 11 de septiembre.
El embajador adjunto de Israel ante la ONU declaró que Tel Aviv no permitirá el ingreso del delegado a su territorio...


ASESOR DE B. OBAMA RECHAZA LA PALABRA DE BUSH

Jeremiah Wright, pastor estadounidense y líder espiritual de la Iglesia Afro Norteamericana Trinity United Church of Christ (TUCC), ya no es más el consejero espiritual de Barack Omaba, el candidato negro del Partido Demócrata de los Estados Unidos y uno de los favoritos en las elecciones presidenciales de 2008.
Las declaraciones de Jeremiah Wright y el trabajo manipulador de la prensa comercial han obligado a Obama a tomar distancia de Wright por sus frases comprometedoras. El presidenciable ha precisado que no lo repudia como religioso, ni como viejo amigo, pero lo hizo a un lado.
Jeremiah Wright, desencadenó la polémica cuando acusó indirectamente al gobierno de los EEUU de estar implicado en los atentados del 11-S. Dijo: “Hemos bombardeado Hiroshima, hemos bombardeado Nagasaki y a muchas más ciudades, haciendo más víctimas en New York y el Pentágono (...) Nosotros hemos apoyado el terrorismo estatal contra los palestinos, contra los sudafricanos [época del apartheid] y ahora no somos dignos, porque las cosas que hemos hecho en otros lugares del mundo, nos regresan como un boomerang.”


DEBATE EN COMISIÓN PARLAMENTARIA DE JAPÓN

En el inicio de 2008 la Comisión de Relaciones Exteriores y de Defensa del Senado de Japón celebró una audiencia con el primer ministro y el ministro de relaciones exteriores. Se abordó una nueva ley antiterrorista y la participación nipona en la guerra contra Afganistán, junto a Estados Unidos.
En la oportunidad, el senador Yukihisa Fujita recordó que la guerra contra el terrorismo comenzó tras los atentados del 11 de Septiembre. Manifestó: “Todo lo que ha dicho el gobierno es que creemos en la responsabilidad de Al Qaeda porque es lo que nos ha dicho la Administración Bush.” Y agregó que “no hemos visto prueba alguna de esa culpabilidad.”
A propósito de los más de 20 japoneses que resultaran muertos el 11-S, sostuvo que Japón debió llevar adelante su propia investigación, cosa que no hizo. El canciller admitió que se había dado por buena la información del gobierno norteamericano.

El senador Yukihisa Fujita contrastó la carencia de información que padecían las familias de las víctimas, consecuencia de los pobres datos recibidos, con evidencias resultantes de fotos, que hacen cuestionable o, al menos muy dudosa, la tesis del gobierno de USA acerca de cómo fueron realmente los ataques. E invitó a analizar fotos e imágenes a los miembros de la sesión, exponiendo que se trataba de “pruebas concretas”. Sostuvo que un procedimiento de “simulación informática muestra lo grande que era el avión que se estrelló, por ejemplo, contra el Pentágono”, resultando que “solamente hay un hueco demasiado pequeño” cuando la aeronave era un 757, de 38 metros de envergadura. Añadió que se ve a los bomberos trabajando, sin que se aprecie “ningún daño que haya podido ser provocado” por un impacto tan formidable. Y exhortó a los asistentes: “¡Miren el césped delante y, fíjense, no hay ningún pedazo de avión!”

Múltiples elementos fueron expuestos, ampliando dudas razonables:
-El avión que cayó sobre el Pentágono dio media vuelta, evitando las oficinas del Ministerio de Defensa de USA. Se estrelló sobre la única sección del edificio que fuera reforzada para resistir ataques con bombas.
-No se encontraron la mayoría de las grabadoras de vuelo de los aparatos.
-Más de 80 cámaras filmaban desde el Pentágono. Es muy extraño que no se haya mostrado ninguna de esas imágenes.
-Una pregunta: ¿Alguien puede imaginarse que una hora después que un avión impactara en un punto de una ciudad como Nueva York, otro pudiera hacerlo sobre el Pentágono?
-Concomitantemente con el choque contra las Torres Gemelas grandes trozos de materiales aparecen proyectados a 150 metros de distancia, como si hubieran sido lanzados por una explosión ajena al choque aéreo.
-A una cuadra del World Trade Center, un edificio de 47 pisos se derrumbó 7 horas después. No fue derribado por ninguna aeronave. Cayó en 5 o 6 segundos. Su desplome no condice con su aparente causa: un incendio. El informe gubernamental de junio de 2004 omitió la menor referencia al suceso.
Con semejantes pedruscos en sus sandalias, es obvio que el Papa Benedicto XVI no puede caminar erguido.
Su falta de sinceridad no permite mejorar la opinión que de su iglesia se tiene en los Estados Unidos, ni en el resto del mundo.



waltercelina1@hotmail.com

domingo, 27 de abril de 2008

MARCOS ANA, LA VOZ RESISTENTE

Escribe Walter Ernesto Celina



La tierra no es redonda:
es un patio cuadrado
donde los hombres giran
bajo un cielo de estaño.
.........................................
Y entonces digo: “El mundo
es algo más que este patio
y las losas terribles
donde me voy gastando”.



(Versos de Mi mundo es un patio,
de Marcos Ana)

EJEMPLO PARADIGMÁTICO

Invitado, esta vez, por el Centro Cultural de España (CCE), ha retornado a Uruguay Fernando Macarro Castillo, universalmente conocido como Marcos Ana.
Su vida es un esclarecido ejemplo de la dignidad de un hombre, puesta al servicio de los ideales de libertad, fraternidad, solidaridad, republicanismo y transformación social.
Condenado a muerte por dos veces por el régimen del generalísimo Franco, permaneció 23 años en sus mazmorras. Evadido, tras ser apresado en el curso de las represiones falangistas, soportó atroces torturas, que no lo derribaron.

Mis grandes amigos, el Diputado Rodney Arismendi y el Senador Enrique Rodríguez, lo señalaban constantemente como un modelo de militante, cuando en la década del 60 pisó este suelo. Arribó en 1963, tras la excarcelación que obtuviera en 1961, a consecuencia de la intensa movilización internacional de las fuerzas democráticas.
El señalamiento no era ocioso. Uruguayos ofrendaron sus vidas como partícipes de las heroicas Brigadas Internacionales, llegadas a España para contener la retrogradación de la humanidad. Uruguayos revistaron en filas de la solidaridad con la República Democrática avasallada. Y, cuando alcanzada su libertad, Marcos Ana llega a nosotros, hace 45 años, militares golpistas y fuerzas reaccionarias incubaban el zarpazo que darían, diez años más adelante, con un cuartelazo.
El valor de su ejemplo pues, estaba lleno de profunda significación. Legisladores republicanos lo recibieron en el Parlamento y, a la vez, los dirigentes nacionales que he citado, lo acogieron en su sede política, en un acto memorable. Fue una clase de historia contemporánea y, a la vez, un alerta sobre las acechanzas que se cernían sobre las instituciones.
En un reciente reportaje concedido a un medio montevideano y, poco después en la sede del CCE -abarrotada de público-, Marcos Ana rememoró el recibimiento extraordinario de que fue objeto en el Aeropuerto de Carrasco, en 1963. Y reitera, con convicción: “Uruguay nos prestó una gran solidaridad”, para luego decir: “Cuando la noche cayó sobre este país, procuré devolverla.”
En la sala de actos hay una emoción muy grande. El visitante sube a las gradas. Muchos lo abrazan. ¡Es que se está en presencia de un amigo entrañable!



EN LA CRUZ DE LAS CÁRCELES FRANQUISTAS

Cabe citar el itinerario fatídico al que fue sometido, en medio de crueles vejaciones. Cárcel del Conde Toreno (donde falleciera de tuberculosis el poeta Miguel Hernández), Penal de Ocaña, Prisión de Alcalá de Henares y Penal de Burgos. Algunos detalles: Incomunicación de 307 días, con 3 meses de aislamiento total, sin movilidad, arrojado sobre el piso, inundado de agua, a diario, por la guardia. En Burgos permaneció 9 meses excluido en una celda.

En 1954 estructuró sus primeros versos.
Amanezco, y ya todo/ -fuera del sueño- es patio:/ Un patio donde giran/ los hombres sin espacio./ ¡Hace tantos siglos/ que nací emparedado,/ que me olvidé del mundo,/ de cómo canta el árbol,/ de la pasión que enciende/ el amor en los labios,/ de si hay puertas sin llaves/ y otras manos sin clavos!

El acento de Marcos Ana se dramatiza. El verso sencillo se hace clamor acuciante:
Oye, hermano, te llamo desde un muro;/ clavado entre unas piedras/ donde las sombras hacen su nidada./ Hablo de la pena./ Entre los huesos mismos del dolor te llamo./ Mi voz, como esas hierbas/ que en la ranura de una roca crecen,/ se ha mantenido pura!/ No escupió a su bandera,/ no doblegó sus hombros,/ ni ha mentido canciones,/ ni se pasó al oscuro.



UN HOMBRE SANGRANDO Y ROTO

Decidme como es un árbol es el título de la memoria escrita por Marcos Ana para reflejar su dolida experiencia de preso político y sus ideales de ciudadano universal. Acaba de manifestar: “Vengo a hablar de la memoria histórica. No para reabrir heridas, sino para que no se cierren en falso.”
También afirmó: “Amnistía no es sinónimo de amnesia.”

El cineasta Almodóvar, que ha de registrar en un filme pasajes de esta vida sorprendente, ha sostenido que la de Marcos Ana “es un ejemplo”.

Una vez más, seguro de sus principios, Marcos Ana acaba de repetir en Montevideo: “...Veo la cárcel y las torturas y todo lo que he vivido en ella como una consecuencia de una vida que elegí. Yo he querido vivir la vida de un revolucionario y, eso, hay que pagarlo de alguna manera.”
La poesía de Marcos Ana continúa emitiendo su mensaje cuando proclama:
No sabéis lo que es un hombre sangrando y roto en un cepo,/ si lo supieseis vendríais en las olas y el viento./ desde todos los confines, con el corazón deshecho,/ enarbolando los puños para salvar lo que es vuestro.





jueves, 24 de abril de 2008

SEXO Y SACUDIMIENTOS TELÚRICOS

Escribe Walter Ernesto Celina

El estudio de los comportamientos amorosos permitió, desde la antigüedad más remota, examinar el sistema de mitos. En la cosmovisión politeísta griega, así como en la romana, Eros, Afrodita, Cupido, Venus y otras figuras son elementos emblemáticos, sin dejar de lado los sátiros y las ninfas.
Voces como erotismo, excitación del amor sensual, o concuspicencia, afición desmedida por los placeres sexuales, derivan de Eros y Cupido, respectivamente.
Las leyendas de Narciso, Edipo, Electra fueron recogidas por el sabio Sigmund Freud al exponer acerca de determinados fenómenos de la personalidad.

Una especie de retorno a la explicaciones bíblicas, sobre los castigos divinos a Onán o a los pobladores de Sodoma y Gomorra, acaba de ser ofrecida en el parlamento israelí.
El diputado Shlomo Benizri, del Partido Shass, de la comunidad sefaradí, ha dicho con palabra añeja: “Estamos buscando soluciones terrenales para protegernos de los efectos de los sismos y yo propongo otra vía: el Talmud nos dice que una de las causas de las sacudidas telúricas es la homosexualidad (...) Dios ha dicho que Él sacudirá el mundo para despertarlos a Uds., si Uds. sacuden sus genitales allí donde no se supone que lo deban hacer”.
De este modo, los homosexuales son los culpables de los terremotos que conmocionan a Israel en los últimos meses.
Por su parte, el rabino que preside el Shass -tercer partido judío, posicionado antes de Likud-, sostuvo que el huracán Katrina fue un castigo divino infringido por Dios a los Estados Unidos por el desmantelamiento de una colonia. En el 2005 había manifestado que la homosexualidad es una enfermedad, deseando el pronto restablecimiento de quienes la hubieren contraído...

La homosexualidad se define como una orientación caracterizada por la interacción y/o atracción hacia individuos del mismo sexo. Incluye el lesbianismo. Empleado el término, en un inicio en 1869, se consideró que caracterizaba una patología. Hacia 1886, Krafft-Ebing la denominó “desviación sexual”. La opinión científica ha variado radicalmente, aunque permanecen determinadas descalificaciones, prejuiciosas unas, religiosas otras, como la dada en el legislativo israelí.
La homosexualidad parece haber existido desde los comienzos de la humanidad, en las diversas razas y, asimismo, en numerosas especies animales, incluyendo los primates superiores.
El castigo celestial, según relata la Biblia en el Génesis, lo padeció Onán por no haber dejado descendencia. Derramaba sobre la tierra el semen, evitando procrear, lo que al parecer hacía por codicia, para prevalecer en los derechos hereditarios de su hermano.

Se considera onanismo la práctica masturbatoria o de placer en solitario. Históricamente se le reputó como deleznable y de graves consecuencias para la salud, nociones descartadas por la sexualidad moderna.

Del relato bíblico sobre Sodoma y Gomorra deviene la noción de sodomía (relación anal de un hombre con otro, o con una mujer). Las ciudades referidas habrían sido destruidas, se ha dicho, como consecuencia de los desenfrenos sexuales. Para Jhon Boswell esta interpretación moral reprobatoria ocultó la verdadera causa del castigo: los sodomitas se habían negado a recibir a los ángeles e incluso los habrían agredido. La excepción fue la de Lot y su familia. En esta historia, asimismo, aparece el ingrediente del incesto.

Las cuestiones del sexo, los comportamientos humanos y divinos y las penalidades emergentes suelen enmascarar las realidades. La ridiculez, de tinte religioso, asumida por representantes del tercer partido del legislativo judío, se exhibe por sí misma. Israel geográficamente se ubica sobre la falla sirio-africana. Según las estadísticas de los observatorios geológicos alrededor de cada 100 años se producen movimientos sísmicos, con intensidades superiores a los 6 grados en la Escala de Richter, con consecuencias devastadoras. En la frontera este de Israel se verifica un reajuste de las placas tectónicas en la falla de las cordilleras no visibles: 10 desplazamientos con magnitudes entre 2 y 5 grados.
Desde el año 130 de nuestra era, en que el sabio chino Chang Heng, formuló una teoría sobre las causas de los terremotos a la actualidad, en que existen mapas de las profundidades y composición de la tierra y exploraciones de los fondos submarinos, se conocen muy bien las causas determinantes de los sismos.

Dos palabras más, abreviando: El Valle del Rift, es una depresión que se extiende a lo largo de más de 4.830 kilómetros, desde Siria, en el suroeste del Asia, hasta Mozambique, en el sureste del África. El valle fue formado, se estima, hace unos 50 millones de años, por desgaste y hundimiento de la corteza terrestre. Las altitudes del Rift Valley van desde los 395 metros por debajo del nivel del mar, en la costa del Mar Muerto (Israel), hasta los 1829 metros por encima del nivel de referencia, en los acantilados de Kenia.

La ciencia esclarece los significados de los mitos y de tantas leyendas que les siguen en hilera. Desvanece pretensiones y aniquila prejuicios que vienen de viejas sociedades, ya muertas. La obsesión sobre la homosexualidad y otros comportamientos humanos es inconducente. Se precisan otros análisis. No penalidades, ni imprecaciones. Tampoco castigos extra terrenales.
Para la torta del diputado israelí Shlomo Benizri, la frutilla que le faltaba: Hace 20 años, el cuerpo deliberante que integra ¡dejó de considerar delito la homosexualidad!
Sin salida ya, tendrá que archivar sus figurines.

domingo, 13 de abril de 2008

NI TANTO, NI TAN POCO

Escribe Walter Ernesto Celina
En doctrina, en un estado de derecho -como es Uruguay-, debería regir de modo pleno el principio de la separación de poderes, con las garantías inherentes a cada cuerpo, un régimen de contralor afinado y mecanismos de transparencia a la vista de la ciudadanía.
La Constitución, que nunca es un mecanismo acabado, ni acompasa los tiempos de la sociedad, ha concentrado una fuerza importante en el área del Poder Ejecutivo, ha rebajado potestades del Legislativo y ha hecho del Poder Judicial una estructura sin autonomía financiera, cuya cabeza -la Suprema Corte (SCJ)- se integra no sin pujas políticas. Las vestales lucen, muy a menudo, con sus ropas raídas y, en ocasiones, parecen mirar por debajo de las vendas que cubren sus ojos.

Al gobierno frenteamplista, que conduce el presidente Vázquez, se le ha alterado el humor por las sentencias que la SCJ emitió respecto a recursos de inconstitucionalidad presentados por núcleos de personas cuyas jubilaciones quedaron gravadas por el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Si bien, como dice el Frente Amplio y su Ministro de Economía, un 80% de las pasividades están exentas de la quita, no es menos cierto que tales asignaciones son de tal insuficiencia que sería enterrar más en la ruina a sus titulares, si se les hicieran deducciones. ¡Tan alejadas están de los valores de la canasta básica!
El 20% que recibe la imposición son personas que aportaron por el ejercicio de labores de calificación media y superior, correspondiendo el resto a ex funcionarios de gobierno, incluidos ex presidentes, así como a militares, muchos de triste memoria. Esto, se entiende, es harina de otro costal.

Lo que se trata de ver, como lo han expuesto juristas destacados, pertenecientes a los diversos partidos es si, en puridad, es posible afectar los ingresos de los pasivos con impuestos como éste, o con otros que, como el denominado Impuesto a las Retribuciones Personales (IRP) (aplicado bajo gobiernos de los partidos tradicionales), podían ser menguados los ingresos de los trabajadores del ayer.

Cabe puntualizar que, si antes los frenteamplistas afirmaban -cuando estaban en la oposición-, que las asignaciones de la previsión social no podían ser objeto de imposición, ahora, que son mayoría absoluta gobernante, han entrado en abierta contradicción cuando sostienen lo que tiempo atrás declararon aborrecer. La negación era por partida doble: desde la óptica de la filosofía del derecho, como por la no pertinencia jurídica de aplicar gabelas a las jubilaciones.
Blancos y colorados, paradojalmente, vuelven sobre los pasos de cuando fueron gobierno y abogan, en contra, con variantes, de lo que en su momento impulsaran. Lavan sus pecados...

Por su parte, el Ministro Astori, adalid del impuesto, se ha demostrado generoso en las exoneraciones tributarias con los capitales extranjeros y cáustico con el Fiscal de Corte que, aunque catapultado al cargo por el Frente Amplio, dictaminó considerándolo inconstitucional con referencia a los pasivos.
Tal presión del ministro fue vista con desagrado en el foro, en virtud que el Fiscal de Corte es un funcionario eminentemente técnico y de alta responsabilidad. No inexpugnable a las críticas, pero a quien debe brindársele el trato debido, por sus atributos intelectuales y versación.

Cuando los primeros fallos adversos al gobierno estaban a punto de ser sentenciados por la SCJ, desde el oficialismo y la oposición menudearon críticas ácidas, cálculos y amenazas.
Al parecer, dentro de la Corporación, los períodos de estudio de los expedientes a cargo de los ministros, padecieron algunas alteraciones, generándose un retraso en las decisiones. Ello resultaría significativo pues, con el egreso de uno de sus integrantes -la magistrada Bossio-, la relación de 3 a 2, en varios pronunciamientos, podía revertirse o entrar en un impasse, hasta su efectiva sustitución por un nuevo ministro.

Agravando más la cuestión, antes de conocerse los fallos, desde la SCJ se filtró cómo emitirían sus votos los componentes del Cuerpo.
El ex presidente y actual senador Sanguinetti puso el dedo en el ventilador cuando requirió a la SCJ informes al respecto a cómo se habían cumplido los plazos de estudio de los recursos por los ministros. La Corporación se sintió molesta y respondió parcialmente, interpretando que se le interrogaba sobre materia una jurisdiccional, lo que, en general, se ha visto como una negativa al suministro de datos sobre una mera actividad administrativa. Sólo que implica a los más altos magistrados...

Pero la falencia de la Corte quedó, de algún modo, disipada. No subsanada.
¿Qué ocurriría? Desde el gobierno se puso a la SCJ bajo el alcance de tiros de cañón. Así, desde el partido del presidente, la saliente ministra Bossio fue acusada de presunta implicancia. Al retirarse accedería a su jubilación y, para un intérprete de ocasión, debería haberse excusado de fallar en los expedientes que declararon la inconstitucionalidad del IRRP sobre jubilaciones, que no la comprenden...
El senador Mujica, del sector mayoritario del Frente Amplio, pidió que los ministros judiciales no interfirieran con el poder político y las pragmáticas del gobierno. Blandió la amenaza de un juicio a integrantes de la Corte, desconociendo las bases en que este puede sustanciarse!
Es verdad: La vestal ha tenido sus tribulaciones y ha mostrado que la venda sobre sus ojos no siempre está firme. Tan nítido como eso es que se ha sentido embestida o atropellada. La Asociación de Magistrados, que agrupa a los jueces uruguayos, así lo ha declarado, como derivación de los sucesos.

Ni lo uno, ni lo otro está bien.
Ni tantos empujones, aquí o allá. Ni que nadie se sienta exento de la crítica, incluida la SCJ en cualquiera de sus ámbitos.
En cuanto al sistema político, sería mejor para todos que procediera con la debida coherencia. Tanto cuando se está en el llano y luego en el gobierno, o viceversa.

En cuanto a las jubilaciones, no es cuestión de banderías circunstanciales, ni de hacer cálculos de mezquinos electoralismos, sino de tener una actitud ética hacia los sectores que conformaron la palanca principal del trabajo nacional.
Los jubilados deberían ser los primeros en asegurar, por sus organizaciones representativas, la intangibilidad de las prestaciones ganadas con sus aportes.

Habrá que avanzar con más independencia en la toma de una conciencia política y gremial. Lo que importa es el interés público y el funcionamiento cristalino de las instituciones y no las maniobras de sus agentes.
A este fin he querido aportar las precedentes reflexiones.


waltercelina1@hotmail.com

lunes, 7 de abril de 2008

CONTRAHOMENAJE AL GRAL. LÍBER SEREGNI

Escribe Walter Ernesto Celina


La opinión pública conoció recientemente la determinación del gobierno central de nominar “Gral. Líber Seregni” el puente sobre el Río Negro, frente a Mercedes.
A ese homenaje cumplido se contrapone la inepcia municipal capitalina para llevar adelante el parque que, bajo la advocación de la misma personalidad política, se proyectara en la ex Estación de Tranvías del Cordón, en la manzana ubicada en las calles Daniel Muñoz y Eduardo Víctor Haedo, entre Martín C. Martínez y Joaquín Requena.

El 9 de julio de 2007, dos arquitectos de la Intendencia de Montevideo informaron, en una reunión de barriada, acerca de los detalles de las obras. Los bocetos exhibidos quedaron de manifiesto en la Casa de los Vecinos, en el Centro Comunal 2.

La demolición de los galpones tranviarios estaba entonces concluida y retirados los escombros.
Hoy, un yuyal descomunal cubre, palmo a palmo, el área. Los arbustos silvestres superan la altura media de las personas.
A este “espacio verde sui géneris” se suman los vertidos de basuras y deshechos, así como la ocupación de los fosos existentes por gentes carentes de vivienda.

A la hora de iniciar la liberación del predio de las viejas estructuras, el Sr. Intendente se mostró ante la prensa junto a las máquinas topadoras...
Ahora, con sus asistentes técnicos y políticos, debería venir a posar frente a la vegetación selvática, generada en el corazón de la ciudad.
Sólo a esto ha podido llegar la inoperancia comunal.

En resumen: Un proyecto en naufragio y un inusitado contrahomenaje.
Lamentable.

viernes, 21 de diciembre de 2007

MERCEDARIOS TRAS UN DISCÍPULO DE ANTONIO GAUDÍ

Escribe Walter Ernesto Celina

ALGO PARA RECORDAR

La escuela arquitectónica modernista catalana tuvo en Antonio Gaudí, Luis Montaner Domenech y José Puig Cadafalch tres formidables puntales.
En el medio siglo que va desde 1880 a 1930 ellos constituyen el verdadero eje de una tendencia que rompe las viejas formas de la construcción. Quiebran el tradicionalismo, aportando como señal distintiva elementos estéticos, en los que casi siempre aparece la valoración de la naturaleza.

En el acto de graduación de Gaudí, en 1878, el Director de la Escuela de Arquitectura de Barcelona dijo del novel profesional: “Hemos dado un título a un loco o a un genio.”
Fue, precisamente, lo segundo.
Aquella mente singular tomó a su cargo, en 1883, las obras -iniciadas hacía poco- de lo que se transformaría en el famoso Templo Expiatorio de la Sagrada Familia, una irrepetible proeza de destreza e imaginación y uno de los monumentos históricos de la humanidad más visitados en la vieja Europa. Paradojalmente, aún inconcluso.

EN EL CENTRO CULTURAL DE ESPAÑA
No fue para hablar en detalle de Gaudí que un conjunto de mercedarios asistió, días atrás, a una de las salas de conferencias del Centro Cultural de España, ubicado en el corazón de la Ciudad Vieja montevideana.
Luis Alberto Morales Carrea, licenciado en letras, y Manuel Santos Pírez, profesor e historiador, oriundos de Mercedes (Uruguay), pusieron en escena la personalidad de Francisco Antonio Matosas Amat, nacido en Badalona (España), el 20 de mayo de 1886.
Venido de la península ibérica, Matosas hace su primera radicación en Santiago del Estero (Argentina). Permanece allí desde los años 1909-10 a 1916-17, estableciéndose después y, definitivamente, en Mercedes.
Su peculiar estilo aparece en distintas obras dejadas en Argentina, pero será en Mercedes y en estancias vecinas a la ciudad donde se encontrarán piezas y trabajos definitorios de su concepción constructiva y plástica, con claros rasgos de haber abrevado en la escuela de Gaudí.

UN LIBRO DE INVESTIGACIÓN

“Matosas, el constructor” es un libro que trae una copiosa información y ricos testimonios de familiares y personas que conocieron íntimamente o trataron con habitualidad a Don Francisco Antonio Matosas Amat.
Luis Morales Carrea tuvo la capacidad de rastrear en profundidad los antecedentes disponibles, amalgamándolos con fotografías de fachadas, así como con las de esculturas, frisos, bajo relieves, detalles particulares, etc., de donde surge el perfil de una producción que insumiera decenas de años y las aristas de la personalidad del creador.
La masa de datos acumulados es muy valiosa y constituye una herramienta preciosa para proseguir indagaciones sobre una visión filogaudiana y muy personal del brillante ejecutor catalán.
Puede afirmarse que, a partir de esta invalorable contribución, será posible acceder, con nuevos trabajos, a una caracterización técnica más exacta de la disponible hoy, para ubicar al maestro en el cuadro de los pioneros de la estética constructiva de la primera mitad del siglo XX en el Uruguay.

RASTREADORES DE UNA HISTORIA SIGNIFICATIVA

Es por el testimonio del Sr. Humberto Nazabay -presente en el acto de referencia con su esposa, la Sra. Coti Acosta-, que Matosas recordaba sus labores de picapedrero en canteras españolas, lo que le permitiera el contacto con arquitectos, escultores y especialistas de la escuela barcelonesa.
Recordaba el Prof. Manuel Santos Pírez -dilecto compañero de barrio en tiempos adolescentes-, que el Dr. Eugenio Petit Muñoz, integrando mesas examinadoras de historia, aconsejaba a sus colegas recoger siempre los antecedentes y asentarlos de manera fehaciente, como forma de defender con mayor exactitud la verdad. Atribuyó, como especial mérito de la labor de Luis Morales, que hubiera apelado al recurso de aquel sistema aconsejado, para integrar con amplitud atrayentes pasajes de un operario de la construcción, poseído de una genialidad inusual.
En su época, los trabajos de Matosas despertaban, de primera intención, asombro por lo que no se acababa de entender bien. Un ser mitológico, una escena religiosa, unos símbolos esotéricos y figuraciones menos comunes, sorprendían. Interpretar aquellos ámbitos, resaltados por colores no habituales, con un fuerte acento en los rojos y los ocres, no estaba al alcance de todos hacerlo.
Hoy siguen asaltando a quien los ve. Admiran y deleitan.
Manuel Santos Pírez fue el primero en reseñar las creaciones matosianas en contribuciones periodísticas, después recogidas en publicaciones nacionales.
Su ex alumno, valido de su saber académico, pone ahora, bajo un haz de luz, la labor de aquel forjador severo que fue Don Francisco Matosas.


LA EXPRESIÓN POR EL ARTE

Como uno más, puedo dar fe de la labor de este auténtico trabajador. Viví muy cerca de su domicilio y nuestras familias se trataron muy amistosamente. Conocí a sus descendientes.
Vi cruzar a Matosas por las calles mercedarias, con la antigua indumentaria blanca, característica del gremio de los albañiles más calificados; casi siempre acompañado por su fiel oficial y amigo, el Sr. Vallejo.
Matosas vivió horas duras en su España natal. Época de ásperas represiones antiobreras. Asistió al parto de la nueva arquitectura y al sueño político del mundo trabajador de los años 17 del siglo XX.
Como emigrante conoció las inestabilidades económicas del sistema de dependencia de la América Nueva.
Fue un individuo indoblegable, un esteta y un pensador que levantó su tribuna sobre los andamios. Estuvo identificado con los anhelos de libertad.
Muy seguramente, fue embuido de este sentimiento, que dedicó la escultura al aviador Luis Tuya Martínez, en la ochava de la calle Florida (hoy Castro Careaga) y Rivera. Se trataba de un homenaje al mercedario que quebró sus alas en defensa de la República Española, formando parte de las Brigadas Internacionales.
De Matosas se ha de seguir hablando.

FICHA
Las 325 páginas de “Matosas, el constructor” tienen la autoría de Luis Alberto Morales Carrea. Pertenecen a Ediciones Cauce. La impresión es de ZonaLibro, Montevideo. Noviembre de 2007. Valor $250.
waltercelina1@hotmail.com